Por un lado, la crisis sanitaria nos ha permitido ver lo mejor de la humanidad, este sentimiento de camaradería y resiliencia, pero por otro lado, esta pandemia ha tenido un impacto enorme en el medio ambiente. Si te preguntamos, seguro que ya has visto alguna mascarilla o una toallita tirada al suelo en la calle (aunque haya una multa de 68 bolas), ¡está arruinada!
¿Pero cómo tirarlos? Primero debes meterlas en una bolsa que tengas dedicada a este tipo de residuos, y una vez que estés listo para tirarla debes cerrarla y esperar un día para finalmente poner tu pequeña bolsa de basura covid en el contenedor de basura de tu hogar (no en su contenedor de clasificación). ¡Sí, vuestras mascarillas se transformarán en energía en la planta incineradora!
Menos es mejor
Esto no significa que debamos usar tantas mascarillas como sea posible. Una mascarilla desechable puede permanecer en nuestro entorno unos 450 años, es decir, ¡el doble de lo que lleva viva Jonathan, la tortuga más antigua del mundo! Al clasificarlas mal o tirarlas a cualquier lugar, nuestras mascarillas pueden acabar en nuestros mares, el resto de la historia ya la sabéis, podría haber más mascarillas que medusas en el océano.
“Una mascarilla desechable tiene una vida útil de unos 450 años”
Si todos usamos mascarillas reutilizables, la cantidad de mascarillas que se desechan disminuiría en 95 %, y tendríamos un impacto climático 10 veces menos severo. La mascarilla de tela es entonces una de las mejores alternativas que tenemos (y puedes elegir el diseño que quieras, genial, ¿no?). ¡Pero ten cuidado! Dijimos que nuestro impacto podría disminuir, no desaparecer. ¡Aún necesitas lavar tu mascarilla y traer más de una si estarás afuera todo el día!
En esta infografía te presentamos información que puedes tener en cuenta a la hora de elegir tu futura mascarilla:

Si quieres saber por qué no deberíamos romper las cartas de nuestros ex, puedes leer nuestro blog de reciclaje de papel, y síguenos en nuestras redes sociales!